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López Obrador ratifica su mandato hasta 2024 tras imponerse en un revocatorio marcado por la baja participación

today04/11/2022 9

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El conteo rápido del Instituto Nacional Electoral arrojó que entre 90.3% y 91.9% de los electores votaron a favor de la continuidad de AMLO y entre 6.4% a 7.8% se decantaron por revocarle el mandato. La participación no llegó al 20%, menos de la mitad de lo necesario para que la consulta fuese vinculante.

El presidente Andrés Manuel López Obrador continuará ejerciendo la presidencia de México hasta 2024, tras imponerse en un referendo revocatorio la opción que defendía su continuidad, aunque el proceso estuvo marcado por una baja participación.

El conteo rápido del Instituto Nacional Electoral (INE) arrojó que entre 90.3% y 91.9% de los electores votaron a favor de que López Obrador “siga en la presidencia”, frente al rango de 6.4% a 7.8% que apoyaron revocarle el mandato “por pérdida de la confianza”.

La participación fue de entre 17% y 18.2%, informó el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova.

Al no conseguirse el 40% de las personas habilitadas para votar (37 millones) la consulta no es vinculante. Incluso, si hubiese ganado la opción que pedía la revocatoria del mandato de AMLO, el mandatario no estaba obligado a acatarla.

Al agradecer el apoyo, López Obrador descartó que vaya a usar esta victoria para impulsar una reforma constitucional que le permita ser reelegido.

“No me voy a pasar porque soy demócrata y no estoy a favor de la reelección. Vamos a terminar la obra de transformación”, dijo el mandatario izquierdista en un mensaje difundido en sus redes sociales.

AMLO, como es conocido el mandatario por las iniciales de su nombre, fue elegido en 2018 para un período de seis años con 30 millones de votos, aunque para el referendo solo fue instalado un tercio de las urnas de la presidencial.

“El presidente ya fue elegido para un periodo”

Quienes se acercaron a las urnas insistían en la importancia de apoyarle o simplemente ejercer un derecho.

“De eso se trata la democracia, de la vigilancia”, dijo Gerardo León, un abogado que votó en el norte de la capital. Otros consideraban innecesario votar y un gasto absurdo en un gobierno que promueve la austeridad. Estas consultas, señaló Alberto Rocha, un funcionario de 52 años, sólo son útiles cuando “lo pide la ciudadanía, no cuando lo pide el gobierno”.

“El presidente ya fue elegido para un periodo, entonces no es necesaria una votación donde se decida si debe continuar”, agregó.

Desde el gobierno se alentó la participación durante toda la jornada con acciones controversiales de apoyo. Por ejemplo, Mario Delgado, líder del partido oficialista Morena, posó en una fotografía junto a una camioneta en la que se leía: “¿Quieres votar? Yo te llevo”.

López Obrador dijo que el sufragio era importante para que “nadie se sienta absoluto”. En su papeleta escribió “Viva Zapata”, en referencia al héroe revolucionario Emiliano Zapata.

Para muchos académicos, el problema no era la consulta en sí, un derecho legítimo y positivo de cualquier democracia, sino cómo se ha utilizado y que se haya confundido a la ciudadanía con mensajes anónimos en redes sociales que advertían de problemas en las votaciones o consecuencias en la continuidad de los programas sociales si los electores no ratificaban al mandatario.

“En México el fraude está erradicado”, aseguró el presidente del INE. “Lo que sí hay son conductas fraudulentas de algunos malos ciudadanos, malos demócratas”.

Varios políticos de Morena y miembros del gabinete presidencial han sido amonestados por distintos tipos de irregularidades.

Georgina de la Fuente, integrante del Observatorio de Reformas Políticas de América Latina, un grupo de análisis, dijo que estos referendos deben tomarse muy en serio y entenderse como un “último recurso, una especie de válvula de escape” cuando la ciudadanía ya no confía en sus gobernantes, y no como “un ejercicio simulador en donde el presidente está poniendo a prueba su popularidad y su capacidad movilizadora”.

Sin embargo, muchas personas de sectores humildes, bases de apoyo de López Obrador, sienten que por primera vez son escuchados.

“Ya basta con no tomarnos en cuenta”, indicó Francisco Salmerón, un barrendero de 61 años que se mostraba orgulloso de poder participar.

Disputa entre AMLO y el INE

De cara al futuro, la votante Ana Patricia Perusquía resaltó que lo importante es que “quede el precedente de que se puede hacer una revocación”.

Pero la académica De la Fuente consideró que los efectos pueden ser negativos si próximos gobernantes usan la consulta de revocación para “medir popularidades” y como “juego político” en lugar de que sea un derecho democrático que ofrezca una salida a situaciones críticas.

Por eso abogó para que la ley de revocación de mandato sí permanezca, pero reformada con el fin de garantizar que si un presidente pierde el revocatorio se convoque a nuevas elecciones —actualmente la norma establece que el Congreso elegiría al nuevo gobernante—, y para que el presupuesto de las autoridades electorales no dependa de vaivenes políticos.

La consulta avivó la disputa entre López Obrador y el INE que, al ver reducido su presupuesto, dijo que no tenía el dinero suficiente para llevarla a cabo. El caso llegó a la Suprema Corte, la cual ordenó efectuar el referendo, aunque al final se hizo con menos de la mitad de lo presupuestado.

Fuente: Univision.com

 

Written by: Editor

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